Estados Unidos Anuncia Nuevos Aranceles a Países Sin Acuerdos Comerciales
El gobierno de Estados Unidos ha declarado que implementará nuevos aranceles a partir del 1 de agosto a aquellos países con los que no haya alcanzado acuerdos comerciales. Esta medida fue confirmada por el secretario del Tesoro, Scott Bessent, quien especificó que estos aranceles aumentarían considerablemente, tal como prometió el presidente Donald Trump en abril, antes de decidir suspender su aplicación para facilitar negociaciones.
Bessent comentó en una entrevista que Trump había establecido plazos para que las naciones lograran acuerdos que eviten la imposición de aranceles. "La fecha límite está enfocada en motivar a los países a negociar. Si desean apresurarse, están en libertad de hacerlo, y si quieren regresar a los términos anteriores, esa es su elección", destacó Bessent.
Trump, en sus declaraciones, indicó que había enviado notificaciones a diversas naciones y que algunos acuerdos estaban en proceso, incluyendo negociaciones con países como Taiwán y la Unión Europea. Hasta ahora, solo Reino Unido y Vietnam han logrado concretar un pacto comercial con Estados Unidos.
En comparación, durante las tensiones comerciales con China, se había establecido una tregua temporal que permitió reducir aranceles de cifras considerablemente altas que ambas naciones se habían aplicado mutuamente.
El secretario del Tesoro también enfatizó que, a pesar de las críticas, la política de ajustes tarifarios no se trata de intimidar a otros países, sino de aplicar "la máxima presión" para facilitar acuerdos justos. Según él, la Unión Europea ha comenzado a mostrar avances significativos en sus negociaciones. Estos desarrollos son críticos para quienes están observando el impacto que estas decisiones arancelarias pueden tener en la economía global y en las relaciones comerciales internacionales.
La situación resalta la importancia del comercio internacional y los acuerdos que los países deben considerar para evitar penalizaciones tarifarias. Estos desarrollos podrían marcar un punto de inflexión relevante en los acuerdos comerciales y la dinámica económica entre Estados Unidos y otras naciones.