La relación entre el expresidente Donald Trump y el magnate tecnológico Elon Musk, caracterizada por una alianza estratégica, ha colapsado públicamente tras una serie de disputas políticas y personales.
El 5 de junio de 2025, la relación entre Donald Trump y Elon Musk, que había sido una de las alianzas más comentadas en la política estadounidense, llegó a su fin en medio de una serie de intercambios públicos hostiles. El conflicto se desató cuando Musk criticó el "One Big Beautiful Bill Act", un ambicioso plan fiscal propuesto por Trump, calificándolo de una "abominación repugnante".
En respuesta, Trump acusó a Musk de actuar por intereses personales y amenazó con cancelar contratos gubernamentales que beneficiaban a sus empresas. La situación escaló cuando Musk insinuó que Trump estaba vinculado a los archivos confidenciales relacionados con el caso de Jeffrey Epstein, una acusación que Trump negó rotundamente.
Este enfrentamiento ha tenido repercusiones significativas en el ámbito político y económico. Las acciones de Tesla cayeron un 14%, mientras que el valor de la criptomoneda asociada a Trump también experimentó una disminución. Además, el conflicto ha generado preocupación dentro del Partido Republicano, con algunos miembros instando a una reconciliación para evitar que la disputa interfiera en importantes esfuerzos legislativos.