Propietarios de la discoteca Jet Set enfrentan acusaciones de homicidio involuntario tras el colapso que dejó 236 muertos. Los empresarios Antonio y Maribel Espaillat, propietarios de la discoteca Jet Set en Santo Domingo, han sido detenidos y acusados de homicidio involuntario tras el trágico colapso del techo del establecimiento el pasado 8 de abril, que resultó en la muerte de 236 personas y dejó más de 180 heridos.
El Ministerio Público de la República Dominicana ha formalizado cargos contra los hermanos Espaillat, señalándolos por "una inmensa irresponsabilidad y negligencia" al no haber intervenido adecuadamente el techo del club para evitar la tragedia.
Según las autoridades, los imputados también intentaron intimidar a empleados y posibles testigos de la empresa Inversiones E y L, S.R.L., encargada de la gestión del local.
La defensa de los acusados ha rechazado las alegaciones, argumentando que las acusaciones carecen de fundamento. Sin embargo, las autoridades han presentado evidencias que incluyen testimonios de extrabajadores que advirtieron sobre el deterioro estructural del techo y afirmaron haber recibido amenazas tras declarar.
Hasta la fecha, se han interpuesto alrededor de 60 querellas contra los propietarios, el Estado dominicano y el Ayuntamiento del Distrito Nacional por presunto incumplimiento de responsabilidades legales de supervisión.
Para los familiares de las víctimas, como el grupo Haineros Dorados, que perdió a 11 miembros, este arresto representa el inicio de un posible camino hacia la justicia.