Recesan solicitud de coerción contra los Espaillat. El 19 de junio de 2025, la jueza Fátima Veloz dictó medidas de coerción contra Antonio y Maribel Espaillat, propietarios de la discoteca Jet Set en Santo Domingo, tras el colapso del techo del establecimiento el 8 de abril, que resultó en la muerte de 236 personas y más de 180 heridos.
La audiencia, que se extendió por más de 12 horas, culminó con la imposición de una garantía económica de RD$50 millones, presentación periódica e impedimento de salida para ambos imputados. El Ministerio Público había solicitado prisión preventiva para Antonio Espaillat y prisión domiciliaria para su hermana Maribel, acusándolos de homicidio involuntario por presunta negligencia en la supervisión y mantenimiento de la estructura del local. Además, se les señala por intentar influir en testigos clave de la investigación.
La defensa de los Espaillat argumentó que sus clientes han cooperado plenamente con las autoridades y han brindado asistencia a las víctimas. Miguel Valerio, abogado de la familia, destacó que las medidas de coerción son una herramienta procesal y no una declaración de culpabilidad.
La tragedia del 8 de abril, durante una fiesta con la participación del merenguero Rubby Pérez, ha generado múltiples querellas contra los propietarios y el Estado dominicano. Familiares de las víctimas, como Franklyn Suero, expresaron su esperanza de que este proceso judicial sea el inicio de la búsqueda de justicia y reparación.