El presidente de Estados Unidos, Donald Trump , firmó una orden ejecutiva que busca impulsar la producción nacional de minerales críticos y tierras raras , con el objetivo de reducir la dependencia de su país frente al dominio casi absoluto de China en este sector estratégico.
La medida se sustenta en la Ley de Producción de Defensa , legislación adoptada en 1950, que permite al presidente movilizar recursos y facilitar créditos para fomentar la explotación interna de recursos esenciales para la seguridad nacional.
Esta orden tiene dos objetivos principales: agilizar los permisos de explotación en territorio estadounidense y otorgar financiamiento directo a empresas del sector aceptadas en producir tierras raras y minerales como litio, cobalto, grafito y níquel.
Estos materiales son fundamentales para la fabricación de productos de alta tecnología como baterías para vehículos eléctricos, semiconductores, sistemas de defensa y paneles solares.
Trump justificó la acción como una respuesta estratégica frente al control que ejerce China en toda la cadena de suministro de tierras raras, incluyendo la refinación, proceso altamente contaminante que muchos países evitan.
Además, el secretario de Estado, Marco Rubio , anunció en Santo Domingo junto al presidente Luis Abinader , que Estados Unidos podría colaborar con la República Dominicana para desarrollar un plan conjunto de explotación de tierras raras, aprovechando las reservas nacionales estimadas en 100 millones de toneladas .
La firma de esta orden marca un paso firme en los esfuerzos de Estados Unidos para recuperar el control de los recursos esenciales y asegurar su autonomía tecnológica.